Llantas

Una llanta es una de las partes centrales de la rueda, cuya función es sostener el neumático y unirlo al eje. Hay muchos tipos de llantas, en función de sus materiales o estética y pueden ir con tapacubos o no.

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Tipos de llantas

Existen muchos tipos de llantas, pero en cuanto a coches, la diferencia fundamental entre ellas radica en el material con el que están fabricadas.

Llantas de aleación. Están compuesta por muchos metales, entre los que destaca el aluminio. Son pequeñas y compactas, con una excelente suspensión, agarre y refrigeración de los frenos. Hay que limpiarlas regularmente para evitar que se oxiden, y pueden deformarse en caso de impacto fuerte.
Llantas de acero. Debido a sus bajos costes de producción, su alta fiabilidad y su buen rendimiento, las llantas de acero se utilizan habitualmente en vehículos comerciales y en modelos de media y baja gama. Son fáciles de limpiar y duraderas. Sus inconvenientes son su peso, su diseño poco atractivo y el hecho de que no tienen una refrigeración adecuada del sistema de frenado.
Llantas de fibra de carbono. Tienen unas características únicas y son a la vez ligeras y resistentes. Se comporta admirablemente en términos de aceleración, manejo y frenado.
Llantas de magnesio. El magnesio es un material ligero y duradero. Estas llantas se utilizan principalmente en competición. Las aleaciones de magnesio pueden adquirirse comercialmente junto a otros productos, lo que abarata los precios. Son frágiles y resistentes a la corrosión.