Suspensión
La suspensión es un sistema que forma parte del chasis y está diseñado para brindar comodidad, estabilidad y seguridad durante la conducción. Es responsable de absorber los impactos y vibraciones causados por las irregularidades del terreno.
La suspensión de un coche se compone de varios elementos, entre los que se incluyen amortiguadores, muelles, brazos de control, barras estabilizadoras y bujes. Su objetivo es mantener el vehículo en contacto con el suelo para que se pueda dirigir la dirección del mismo.
Tipos de suspensión
La suspensión de un vehículo puede poseer distintas configuraciones y diseños, y cada una con sus características y ventajas. Estos son los tipos de suspensiones que existen:
Suspensión Independiente: un sistema de suspensión separado para cada rueda, para que cada una se mueva de forma independiente, de esta forma mejora la comodidad y la estabilidad del vehículo. Se encuentra comúnmente en vehículos de alta gama y deportivos.
Suspensión de Eje Rígido: este tipo, utiliza un eje sólido para conectar las ruedas del mismo eje. Es un diseño más simple y económico, y por consiguiente resta comodidad. Utilizado en vehículos todoterreno y camionetas debido a su robustez y capacidad de carga.
Suspensión Neumática: esta suspensión utiliza bolsas de aire en lugar de resortes metálicos para soportar el peso del vehículo. Permite ajustar la altura del vehículo, lo que mejora la comodidad y la estabilidad. Encontrada comúnmente en vehículos de lujo y SUVs.
Suspensión McPherson: la suspensión McPherson combina un amortiguador y un resorte en una sola unidad. Este diseño ahorra espacio en el compartimento del motor. Esta suspensión es utilizada en gran cantidad de vehículos debido a su eficiencia y versatilidad.
Cada uno de estos diseños tiene sus propias características y beneficios, la elección dependerá del tipo de vehículo y las preferencias del fabricante en cuanto a comodidad y eficiencia.
Averías comunes en la suspensión y consejos para prevenirlas
Durante la conducción, la suspensión está expuesta a los baches del terreno y todas esas vibraciones contribuyen paulatinamente a su deterioro. A continuación, descubrirás las averías más comunes junto con un consejo para prevenirlas y su solución, ¡Sigue leyendo para conocer los tipos de averías!
Pérdida de amortiguación:
Avería: Los amortiguadores pueden perder su capacidad de absorber los impactos y las vibraciones, resultando en una conducción más áspera y menos controlada.
Consejo para prevenir: Realiza un mantenimiento regular del sistema de suspensión y verifica visualmente los amortiguadores en busca de fugas de aceite.
Solución: Reemplaza los amortiguadores dañados por unos nuevos para restaurar el confort y la estabilidad de la conducción.
Ruidos y chirridos:
Avería: Chirridos, crujidos o golpeteos pueden indicar problemas en la suspensión, como bujes desgastados o amortiguadores defectuosos.
Consejo para prevenir: Inspecciona periódicamente los componentes de la suspensión y lubrica los puntos de articulación según sea necesario.
Solución: Reemplaza los componentes desgastados y aplica lubricante en los puntos de articulación para eliminar los ruidos molestos.
Desgaste de los componentes:
Avería: Brazos de control, articulaciones esféricas y casquillos de goma pueden desgastarse con el tiempo, causando holguras en la suspensión.
Consejo para prevenir: Evita conducir en terrenos irregulares y realiza alineaciones y balanceos periódicos para mantener la geometría de la suspensión.
Solución: Reemplaza los componentes desgastados y realiza ajustes de alineación y balanceo para restaurar la estabilidad y el control del vehículo.
Fallos en los muelles:
Avería: Los muelles de la suspensión pueden debilitarse o romperse, provocando una altura de conducción desigual y pérdida de confort.
Consejo para prevenir: Evita sobrecargar el vehículo y reduce la velocidad al pasar por baches y obstáculos en la carretera.
Solución: Reemplaza los muelles dañados por unos nuevos y ajusta la altura de la suspensión según sea necesario para garantizar un viaje suave y seguro.
Detectar y solucionar estas averías a tiempo es crucial para mantener la seguridad y el rendimiento del vehículo. Realizar un mantenimiento preventivo regular y atender cualquier problema de manera oportuna garantizará una conducción segura y cómoda a lo largo del tiempo.
¿Conoces el renting?
Echa un vistazo a las oportunidades y descubre tu mejor opción.
Estrena sin preocupaciones y adaptándolo a ti