Caja de cambios manual
Las cajas de cambios manuales o sincrónicas son las que no pueden cambiar de marcha sin la intervención del conductor. La velocidad de cambio es más rápida que la de los automáticos con cajas de cambios hidráulicas. Son más populares en los camiones pesados o en las cabezas tractoras por su rendimiento de arranque al cargar peso a una determinada velocidad.
Definición de caja de cambio manual
La caja de cambios manual o transmisión manual es la más habitual en España, y requiere de la intervención física de una persona para poder realizar el cambio de marcha. El conductor controla en todo momento las marchas, usando para ello el pedal del embrague y la palanca de cambios. Cuenta con cinco o seis marchas o velocidades, la posición neutral o punto muerto y la marcha atrás, permitiendo al conductor ajustar las revoluciones por minuto a las que trabaja el vehículo a la velocidad empleada.
Elementos de la caja de cambio
La caja de cambios está conformada por distintas partes:
- Palanca de cambios: es el componente que el conductor emplea para realizar el cambio de marcha. Su función consiste en desplazar los selectores hasta la marcha que se quiera usar.
- Selectores: mueven el piñón que corresponde a la marcha seleccionada.
- Piñones: ruedas dentadas que varían de tamaño en función de las marchas del automóvil. La selección de tamaño y posición configura la velocidad que se transmite.
- Eje principal: acoplado a la caja de cambios mediante el embrague, se acciona gracias al movimiento recibido desde el motor, lo que le permitirá girar.
- Eje intermedio: es el encargado de transmitir el movimiento desde el eje de entrada hasta el principal.
- Piñón de marcha atrás: cuando se selecciona la marcha atrás, este piñón se coloca en el tren de engranajes, invirtiendo el sentido de giro del eje principal.
¿Cómo funciona?
Para el conductor, cambiar de marcha es un proceso sencillo. Para ello, solo es necesario mantener pulsado el pedal del embrague y desplazar la palanca hasta la marcha deseada. Una vez seleccionada, se suelta el embrague y esta marcha quedará metida. La conducción se iniciará desde la primera marcha, y se irá cambiando la marcha sucesivamente a medida que aumenta la velocidad.
Ventajas de las cajas de cambios manuales
La existencia de cajas de cambios manuales y automáticas plantea dudas a la hora de seleccionar la adecuada. En el caso de los coches de transmisión manual, la accesibilidad de su precio y el control que ejercen los conductores a la hora de conducir son los motivos por los que puede resultar más atractivo elegir este tipo de vehículo.
¿Conoces el renting?
Echa un vistazo a las oportunidades y descubre tu mejor opción.
Estrena sin preocupaciones y adaptándolo a ti